¿Conoces cuáles son las diferencias entre la Firma Digital y la Firma Electrónica en Colombia?
El desarrollo tecnológico ha sido clave durante los últimos años. De manera progresiva, el uso del papel ha ido perdiendo fuerza en pro de la digitalización y los documentos online. Para ello, la instauración tanto de la firma digital como de la firma electrónica han sido clave hasta alcanzar el posicionamiento con el que cuentan en la actualidad.
Pese a su popularidad, actualmente aún existe cierta confusión en el momento de discernir entre la firma digital y la firma electrónica. Por esta razón, a continuación te contamos cuáles son las diferencias entre la firma digital y la firma electrónica en Colombia.
¿Qué es la firma digital?
La firma digital es un tipo de operación en la que los cálculos matemáticos se encargan de llevar a cabo el cifrado de la información. Su objetivo es ofrecer una seguridad extrema en el momento en el que se lleva a cabo todo el proceso de firma de la documentación.
Como ocurre en cualquier otro escenario online, la firma digital cuenta con unas particularidades muy específicas, ofreciendo diferentes niveles de protección de acuerdo al escenario en el que nos encontremos.
¿Y la firma electrónica?
La firma electrónica es el tipo de firma más común. Puede ser un código, una contraseña o una clave específica. Además, también puede ser un dato biométrico. Por lo tanto, no asume la misma forma que podríamos encontrar en una firma habitual.
En el caso de que resulte una firma electrónica certificada, es importante tener certeza de que la firma efectivamente se emita por una entidad de certificación que es la responsable de afirmar que la entidad de la persona que la solicita es la que, a posteriori, llevará a cabo la firma. No ocurre lo mismo en el caso de la firma electrónica convencional. Si bien es cierto que presenta una buena dosis de autenticidad, la puede emitir cualquier organismo. Por lo que es relevante conocer cuál es el tipo de firma electrónica que estamos utilizando dependiendo de la operación que se vaya a llevar a cabo.
La firma electrónica integra un certificado digital para garantizar los elementos de seguridad, integridad y el no repudio de los documentos firmados, ya que este certificado permite dar fe de un acto o voluntad por parte de los firmantes.
El tipo de firma a emplear en el momento en el que tengamos que establecer una metodología particular dependerá del riesgo vinculado al trámite en cuestión y a las características del mismo.
Como podemos comprobar, existen importantes diferencias en el momento de discernir entre las diferentes firmas que podemos encontrar para llevar a cabo la rúbrica de diferentes documentos. En un contexto como el actual, en el que existe una clara tendencia hacia la consolidación de este tipo de documentos online, la firma a través de este modelo de operaciones se ha convertido en imprescindible a dominar en cualquier escenario.
