Alfred Carlton Gilbert
Alfred Carlton Gilbert nació en 1884, en Salem, Oregon. Desde la adolescencia, se sintió fascinado por los trucos de magia. Durante la secundaria, descubrió su habilidad para el atletismo, destacándose en lucha, pista y campo, y llegando a ser una estrella del fútbol universitario.
A pesar de su pasión por el deporte, Gilbert era un estudiante excepcional y decidió inscribirse en la Escuela de Medicina de Yale. Para financiar sus estudios de medicina, realizaba actos de magia y fundó una empresa que producía Mysto, kits de magia para principiantes.
En 1908, Gilbert hizo una pausa en sus estudios para participar en los Juegos Olímpicos de Londres, Inglaterra, donde ganó la medalla de oro en salto con garrocha.
Al finalizar la escuela de medicina en 1909, Gilbert optó por expandir su negocio de juguetes en lugar de ejercer la medicina. Viajaba frecuentemente en tren entre New Haven, Connecticut y Nueva York. Durante uno de esos viajes, en 1911, se le ocurrieron varios inventos.
Observando por la ventana del tren a trabajadores montando vigas de acero en una torre eléctrica, se inspiró para crear un kit de construcción para niños, similar a un juguete británico llamado Meccano.
En 1913, lanzó al mercado el «Mysto Erector Structural Steel Builder», promocionándolo extensamente. El juguete ganó rápida popularidad, permitiendo a los niños construir una metrópolis en miniatura con rascacielos, puentes y ferrocarriles.
Pero Gilbert no se detuvo ahí; produjo algunos de los mejores modelos de trenes de la historia (1946-1966), desarrolló varios kits de química para niñas en 1958, un laboratorio de energía atómica con partículas radiactivas reales y, por supuesto, continuó con la producción de sus kits de magia Mysto.
Al momento de su fallecimiento en 1962, Alfred Carlton Gilbert había registrado 150 patentes para sus inventos, que eran mucho más que simples «juguetes». Gilbert no solo era un creador de «diversión sana», sino que aspiraba a que los niños disfrutaran de experiencias más enriquecedoras. Tras su muerte, la compañía Meccano (ahora Meccano Ltd) adquirió los derechos del «Mysto Erector Structural Steel Builder», que sigue vendiéndose en la actualidad.