Los Grandes Líderes son los Grandes Maestros

Los líderes destacados son también excelentes educadores

Los líderes destacados son también excelentes educadores. Una persona puede tener la capacidad de enseñar, pero no de liderar; sin embargo, quien lidera con éxito, inevitablemente enseñará con éxito también.

¿Cómo logra persuadir a todos en una organización, ya sea de 50 o 50,000 empleados, para que se orienten en la misma dirección?

¿Cómo redirige a su equipo hacia una estrategia que les permita sobrellevar una crisis económica?

¿Cómo garantiza que las personas en cada nivel comprendan las prioridades actuales?

¿Cómo forma a los líderes del futuro? La respuesta es simple: enseñando.

Aquí les presento los primeros siete puntos que les ayudarán a instruir a sus colaboradores de manera más eficiente. Los demás los discutiremos en la próxima sesión.

  1. Enfóquese en ellos, no en usted

Al comunicar, es esencial recordar que usted no es el protagonista. La comunicación debe estar centrada en aquellos a quienes se dirige.

  1. Conozca a sus oyentes

Los grandes educadores entienden tanto el mensaje como a su audiencia. Si solo conoce el mensaje pero no a quienes lo reciben, por más extraordinario que sea, no logrará llegar a ellos eficazmente.

  1. Cree un ambiente seguro

Es crucial que, como líder, establezca un ambiente seguro para quien está desarrollando. Aprender implica vulnerabilidad, por lo que es fundamental asegurar un entorno propicio para ello.

  1. Transmita pasión y propósito

La diferencia entre un buen educador y un excelente radica en la pasión: pasión por el mensaje y por la enseñanza.

  1. Demuestre la necesidad de aprender

Muchos no perciben su potencial. Si no destaca esta discrepancia, perderá su interés en aprender.

  1. Sea claro y sencillo

La base de la enseñanza y el aprendizaje es la comunicación. El gran desafío para los líderes es ser comprendidos.

  1. Muestre vulnerabilidad sin perder credibilidad

Ser honesto sobre lo que se sabe y lo que no, sin perder autoridad, es esencial para un buen educador.

  1. Enseñe con el corazón

La enseñanza genuina es personal y significativa, no formulaica.

  1. Reitere el mensaje

Si desea que recuerden la misión o estrategia, repítala.

  1. Haga preguntas significativas

Fomente la exploración y el pensamiento crítico mediante preguntas que busquen respuestas reflexivas.

  1. Enseñe a pensar

Más allá de transmitir información, fomente el pensamiento crítico.

  1. Escuche más, hable menos

El aprendizaje es un diálogo bidireccional.

  1. Fomente la enseñanza entre pares

Reconozca que los pares pueden enseñar y comunicar eficazmente.

  1. Adapte su enfoque

Reconozca las diferentes formas de aprender y adáptese a ellas.

  1. Nunca deje de enseñar

La relación educativa no termina con la lección, es un proceso continuo.

Los excelentes educadores son apasionados y buscan que sus alumnos avancen rápidamente. Su objetivo es impactar y comunicar eficientemente, ya que la recepción del mensaje depende de su habilidad para transmitirlo.