
Mejores prácticas para la salud bucal
En este post vamos a presentar las mejores prácticas para la salud bucal. Este es un tema muy importante; Eduardo Gonzalez del departamento científico de Confa mencionó lo siguiente: “La boca es una de las principales vías de contacto de nuestro organismo con el exterior y, por tanto, una de sus partes más vulnerables: es más sensible a los cambios de temperatura, a sustancias como el café y el tabaco y a la acción de los virus y las bacterias.
Las bacterias producen muchas patologías y si a eso le sumamos una deficiente salud bucal, puede ser muy perjudicial para nuestro organismo.
Problemas más comunes
La salud bucal se ve afectada especialmente por las caries y la gingivitis, todo esto ayudado por la palca y el sarro que se acumulan en los dientes. las caries afectan a la gran mayoría de los seres humanos, son producidas por las bacterias que metabolizan los azúcares, produciendo ácidos que disuelven el esmalte.
La gingivitis por su parte se produce porque las bacterias de la placa dental, irritan y lesionan los tejidos gingivales; produciendo inflamación y sangrado, en caso crónicos puede convertirse en periodontitis, afectando seriamente los ligamentos y huesos que soportan los dientes .
Más afecciones que son habituales en nuestra boca que son consecuencia de una higiene incorrecta son: mal aliento o halitosis, sensibilidad dentaria, úlceras bucales boca seca (xerosis).
Mejores prácticas para la salud bucal
En este apartado encontraremos las mejores prácticas para la salud bucal, si las seguimos evitaremos muchos problemas:
Limitar el azúcar y carbohidratos refinados
Hoy en día existen muchos productos refinados y golosinas y otros productos con azúcar, recordemos que el azúcar produce ácidos que producen caries. Así que moderación. otra recomendación es que si los ingerimos enseguida debemos cepillarnos los dientes.
Evitar bocados entre comidas
Si estamos en la calle y no tenemos como lavarnos los dientes es mejor abstenerse; la placa solo tarda 20 minutos en formarse después de ingerir alimentos.
Cepillarse cuidadosamente
Después de cada comida, obligatoriamente, si no hay más opción, al menos por la mañana y antes de dormir por dos y tres minutos. con una presión y pequeños movimientos circulares, hacia delante y hacia atrás,debe ser un hábito muy sólido.
Renovar el cepillo cada tres meses
Puede ser antes si se observa que las cerdas comienzan a gastarse. Cerdas suaves para no dañar el esmalte.
Dentífricos de baja abrasividad con flúor
Las pastas dentales que usemos deben contener flúor, ya que previene la caries. También es bueno usar enjuague bucal.
Hilo dental
El hilo dental se mete entre los dientes limpiando profundamente esa parte y elimina los restos de los alimentos.
Cuidar las encías
En especial si son muy sensibles, existen dentífricos especiales y cepillos de cerdas blandas..
No fumar
El tabaco produce disminución de saliva y favorece la aparición de bacterias y desequilibrando el metabolismo oral.
Acudir al odontólogo regularmente
Es un especialista que nos puede ayudar mucho en nuestra higiene bucal. Es recomendable dos veces al año.
Educar a los niños en la higiene dental
Inculcar los hábitos a los niños de una buen salud bucal es una buena recomendación.