Estableciendo Metas Financieras
Estableciendo Metas Financieras. Más allá de solo ganar lo necesario para vivir, todos aspiramos a lograr nuestros sueños. Por ello, al determinar nuestros ingresos deseados, es esencial establecer una cifra que nos desafíe a usar todo nuestro potencial. Pero, ¿cómo definimos esa cifra?
Considera tus ganancias del año más productivo y aumenta esa cantidad en un 50%. Por ejemplo, si ganaste 20.000 dólares, establece como objetivo 30.000 dólares para el próximo año.
A continuación, calcula el volumen de ventas necesarias para lograr esa suma. Suponiendo que tu comisión es del 10%, tendrías que vender 300.000 dólares para ganar 30.000 dólares. Esta cifra es tu meta anual.
Desglosa este objetivo en metas mensuales y semanales. La mejor forma de lograr una meta grande es dividiéndola en pasos más manejables y actividades diarias.
Desde ese momento, evita tareas que no te aporten un valor acorde con tus metas, por ejemplo, quince dólares por hora. Identifica las acciones que, al ser ejecutadas adecuadamente, incrementarán tus ingresos.
¿Qué tareas pertenecen a ese crucial 20% que influye en tu productividad? Aquellas que fomentan tu desarrollo personal y te acercan a tus objetivos. Es vital evitar mezclar deberes laborales con tareas personales que no aportan a tu productividad. No puedes distraerte con actividades no relacionadas con tus objetivos y esperar alcanzar metas ambiciosas.
Siempre que estés trabajando, reflexiona si lo que estás haciendo forma parte de ese 20% crucial para tu éxito. Conocer el valor de tu tiempo te permite tomar decisiones más acertadas en cómo usarlo. Recuerda, tu tiempo es el recurso más valioso; úsalo con sabiduría.