Frederick Henry Royce
Frederick Henry Royce nació el 27 de marzo de 1863 en Alwalton, Gran Bretaña, siendo hijo de un sencillo molinero. A la temprana edad de 4 años, su familia se trasladó a Londres. Tras la triste pérdida de su padre cuando tenía 9 años, solo pudo cursar un año escolar. Entre los 10 y 11 años, vendió periódicos para contribuir económicamente en su hogar.
Al cumplir los 12 años, fue contratado como mensajero telegráfico en Mayfair. Esta ocupación la mantuvo hasta los 14 años, cuando, gracias a su tía, se convirtió en aprendiz en un ferrocarril del norte, en Peterborough, dedicándose a la reparación de locomotoras.
Mientras estaba en Londres, Royce se dedicó a estudiar durante las noches tras finalizar su jornada laboral. Su fascinación por la electricidad le llevó a trabajar en la Electric Light and Power Company, donde mejoró su salario. Esta misma empresa lo trasladó a una filial en Liverpool.
Gracias a sus habilidades en electricidad, en 1884 fundó F. H. Royce and Company junto con A. E. Claremont. En 1893, contrajo matrimonio con la hija de Alfred Punt y posteriormente adquirió una vivienda en Knutsford, cerca de Manchester, donde cuidó de su madre hasta su fallecimiento en 1904.
En 1894, junto a Claremont y con la inversión de James Whitehead, transformaron el negocio en Royce Limited. La empresa amplió su catálogo con la producción de dinamos y grúas eléctricas. A pesar del auge inicial, enfrentaron dificultades económicas por la competencia y la Gran Depresión.
En 1903, Royce adquirió un coche Decauville, de origen francés, pero insatisfecho con su funcionamiento, decidió diseñar el suyo. El resultado fue el primer automóvil Royce en 1904, un vehículo de 10 caballos y 2 cilindros.
A comienzos del siglo XX, Charles Stewart Rolls, un reconocido vendedor de coches, se enteró del innovador diseño de Royce gracias a Henry Edmunds. Tras comprobar la calidad del vehículo, propuso a Royce bautizar los futuros modelos como «Rolls-Royce». El acuerdo se formalizó en diciembre de 1904.
Para 1906, ya se estaban produciendo vehículos Rolls-Royce. Ese mismo año se fundó la compañía Rolls-Royce Limited. Debido al aumento de la demanda, se decidió construir una nueva fábrica en Derby, cuyo diseño fue supervisado detalladamente por Royce.
En 1910, la industria automotriz sufrió un golpe con el fallecimiento de Charles Rolls en un accidente aéreo. No obstante, Royce continuó innovando. Durante la Primera Guerra Mundial, cerca del 50% de los aviones emplearon motores Rolls-Royce diseñados por él.
Postguerra, mejoró su modelo “Silver Ghost”, incorporando un motor de arranque en 1921 y frenos en las cuatro ruedas en 1923. En sus últimos años, estuvo al cuidado de su enfermera, la Srta. Aubin, y continuó trabajando apasionadamente en diseño e innovación.
Frederick Henry Royce falleció el 22 de abril de 1933 en West Wittering.