Alegria de Vivir

El Don de Disfrutar

El Don de Disfrutar. Tres apasionados escaladores se encontraron ante las puertas del cielo, víctimas de un trágico accidente tras caer desde la cima de la montaña Punta de Flecha.

Un ángel guardián, encargado de dar la bienvenida a las almas, les preguntó sobre sus pensamientos finales durante su inesperado descenso.

El primer alpinista, con voz temblorosa, dijo: «Mis pensamientos se centraron en mi familia, en la difícil situación económica en la que los dejaba, siendo yo su único soporte».

El ángel, con mirada compasiva, decidió no permitirle la entrada.

El segundo, con ojos llenos de arrepentimiento, compartió: «Rogué por el perdón de mis pecados, lamenté las heridas que causé y las oportunidades perdidas».

Sin embargo, el ángel determinó que él tampoco podría ingresar.

El tercer montañista, después de un breve silencio, comenzó: «Es un poco embarazoso… Siempre soñé con la libertad de volar, de sentir el viento en mi rostro. Y en ese momento de caída, sentí una euforia indescriptible al contemplar la majestuosidad de la naturaleza desde las alturas. Sí, el impacto fue inevitable, pero mi espíritu se elevó con la sensación de volar.»

El ángel, con una sonrisa en el rostro, le respondió: «Adelante, eres bienvenido aquí. Quien sabe apreciar y disfrutar de las maravillas de la vida, sin duda sabrá valorar la eternidad del cielo».

2 respuestas a «El Don de Disfrutar»

  1. Excelente reflexión. Se Cornejo donde quiera que estés, muchas gracias.

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